Historia de los fundadores

Katherine Aguilar conocía muy bien la lucha. Como mujer hispana con curvas, nunca pudo encontrar piezas que se ajustaran a su tipo de cuerpo y realzaran sus curvas sin sacrificar la elegancia. Su trayectoria en la moda comenzó en 2019, durante los desafíos sin precedentes de la COVID-19, una pandemia mundial. Lanzar un negocio en un momento de incertidumbre y casi dos años de confinamiento global requirió una inmensa pasión y determinación. 

Katherine nació en Venezuela en 1993. Se mudó a Miami con su familia a los 6 años con la esperanza de un futuro mejor, huyendo de un país comunista. Inspirada por el estilo impecable de su madre e impulsada por una pasión por la moda sofisticada. Aunque inicialmente fue aceptada en el Instituto de Arte para estudiar moda, Katherine eligió obtener una licenciatura en negocios en busca de oportunidades más amplias. Años más tarde, regresó a su verdadera vocación, decidida a crear una línea que reflejara su amor por la moda de alta gama, cortes y diseños perfectamente confeccionados que empoderaran a las mujeres a abrazar sus curvas naturales en diseños y telas que acentuaran la silueta femenina. Como mujer con curvas, Katherine comprendió el desafío de encontrar piezas que realmente celebraran la forma femenina con curvas, conservando al mismo tiempo un aspecto refinado y pulido, lo que la llevó a crear PÓSH, una marca que transformó su visión en realidad.

Historia de la marca

PÓSH nació de la pasión por la moda sofisticada que trasciende las tendencias. Los diseños de PÓSH se seleccionan cuidadosamente para adaptarse y realzar las curvas femeninas, creando piezas atemporales que irradian elegancia y confianza. Cada pieza se elabora meticulosamente, con telas suntuosas y cortes a medida que realzan la silueta femenina, fusionando elegancia, calidad y comodidad. PÓSH es más que una marca; es un compromiso para redefinir las piezas de lujo asequibles que permanecerán en tu armario para siempre.

PÓSH abarca todos los aspectos de la feminidad, el lujo y la elegancia atemporal.